
Tantos organismos internacionales como consultoras locales habían previsto una contracción del Producto Interno Bruto de hasta 5%, pero el escenario presentaría cambios favorables, considerando los ajustes al alza en la mayoría de los cálculos.
En julio pasado la previsión era de una caída de 3,5% a raíz de las consecuencias del Coivd-19.
Desde la banca matriz se estima que hay un sesgo alcista de cara a la última revisión del año y todo apunta a que la variación negativa será menor al 3,5% prevista a inicio del año ,con posibilidades de ubicarse entre 2 y 3 por ciento.