
Varios soldados resultaron heridos en el bombardeo iraní del 8 de enero contra una base militar en Irak con presencia de tropas norteamericanas, en represalia por la muerte en un operativo estadounidense del general Qasem Soleimani, considerado un héroe en el país persa.
El nuevo balance fue dado a conocer en un comunicado por la coalición internacional contra el grupo terrorista Estado Islámico que lidera Washington.