
En una nueva ofensiva de la guerra contra las violentas pandillas, el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, impuso este miércoles un cerco militar en torno a una ciudad donde fue asesinado un policía el martes.
“Desde la madrugada, establecimos un cerco de seguridad alrededor del municipio de Nueva Concepción, [departamento norteño de] Chalatenango, con más de 5.000 elementos” de las fuerzas armadas y 500 de la policía para atrapar a los responsables del crimen, aseguró el mandatario en Twitter.
En esta ciudad de unos 30.000 habitantes, ubicada a poco más de 80 km al norte de San Salvador, presuntos pandilleros mataron al policía en la víspera, lo que llevó a Bukele a prometer que va a “arrasar” con las pandillas.
Hace 14 meses el mandatario emprendió una “guerra” contra las pandillas, con masivos arrestos de sospechosos y quitándoles el control territorial que ejercían desde hace años, lo que ha devuelto la sensación de seguridad a la población.
La operación militar de este miércoles comenzó en el caserío rural de La Cruz y se extendió luego a otras zonas rurales de Nueva Concepción, donde los uniformados registraban viviendas y revisaban los documentos de identificación de transeúntes y conductores de vehículos y motos, según medios locales.
Vestidos con traje de combate y provistos de fusiles de asalto, los militares recorrían las calles en vehículos todoterreno Polaris.
Los uniformados realizan la “búsqueda de los responsables del homicidio y toda la estructura de pandilleros y colaboradores que aún se esconden en ese lugar”, afirmó Bukele.
Los pandilleros “pagarán caro por el asesinato de nuestro héroe”, el agente Maximino Antonio Vásquez, agregó.
Con información de Infobae