El abogado Rubén Paredes indicó que el cuestionado legislador va quedando cada vez más en evidencia y aumentan las dudas sobre la legitimidad de su título de profesional del derecho, cuando no puede recordar nombres de compañeros de colegio o facultad, ni de maestros.
«No sé si es para reír o llorar, nada está claro. Ni donde cursó, ni dónde hizo su tesis. Yo tengo hasta dudas de que haya siquiera culminado la secundaria, este señor ni siquiera sabe leer», agregó.
Paredes incluso indicó que le llama la atención la lentitud de la Fiscalía en investigar al senador, pues de comprobarse que su título es falso, no puede seguir ocupando una banca en el Senado de la Nación, sino que debe rendir cuentas ante la justicia.