César “Landy” Torres, gobernador de Alto Paraná, señaló que a menos de 24 horas de haber declarado la emergencia departamental por los altos índices de delincuencia e inseguridad en la zona, el propio comandante de la Policía amaneció este viernes en Ciudad del Este encabezando a los 200 hombres que van a reforzar los operativos de seguridad.
El jefe departamental dijo que estos últimos hechos fueron la gota que colmó el vaso. “Yo me comuniqué con el ministro del Interior y solicité una reacción y el hecho que el comandante haya llegado es una señal que van a tomar en serio esto, pues urge que volvamos a tener la sensación de seguridad. La ciudadanía vive en zozobra”, expresó.
Torres refirió que la comunidad de Ciudad del Este no estaba acostumbrada a este nivel de delincuencia.
El gobernador apuntó a que la mayoría de los que cometen ilícitos en el departamento son personas con antecedentes. Concretamente, mencionó el caso de los dos sujetos que mataron a un joyero en la tarde del miércoles, quienes contaban con condenas, pero por algún motivo fueron beneficiados con un régimen de libertad.
“Esto es algo que exigimos al Ministerio Público y al Poder Judicial que hagan un seguimiento de este tipo de situaciones”, añadió.