El director de Jubilaciones del IPS, Carlos Cabral, explicó que este requisito quedó suspendido desde la pandemia del COVID y tenía que entrar en vigencia a finales de este mes; sin embargo, ayer el Consejo de Administración resolvió volver a suspender, esta vez hasta el mes de agosto.
Cabral mencionó que la obligatoriedad de los jubilados de comprobar periódicamente que todavía siguen vivos es una normativa legal que deben cumplir. La ley exige que la presentación sea cada 6 meses o según lo que indique el Consejo de Administración, indicó.
Acerca de la forma en que se suele aplicar este requisito, Cabral explicó que, en principio, usaban el control a través de la huella dactilar, tomaban el catastro de las huellas digitales de los jubilados y ponían lectores de huella en ciertos lugares. “Al final no es tan eficaz porque con el tiempo las huellas de nuestros jubilados van cambiando», opinó al respecto.
Sobre los jubilados que no pueden acercarse a cumplir con este requisito, dijo que de hecho hay 1.800 beneficiarios que perciben sus haberes en sus respectivos domicilios. “Se les lleva el dinero, normalmente son gente encamada. Quien hace el servicio de pago la Dirección Nacional de Correos y ese pago sirve como control de sobrevivencia porque tienen que firmar por el comprobante o eventualmente estampar su huella dactilar y por el convenio que tenemos con la DINACOPA, ellos son los responsables de hacer ese control», enfatizó.