Según el Instituto de Inteligencia Artificial Centrada en el Humano (HAI) de la Universidad de Stanford, actualmente estas herramientas están pudiendo realizar tareas que se consideraban exclusivas de la inteligencia humana.
Las máquinas han demostrado superioridad en áreas como la clasificación de imágenes, la comprensión lectora básica, el razonamiento visual e inferencias de lenguaje natural desde 2015 hasta la fecha.
Esto ha llevado a un replanteamiento en la evaluación de las capacidades de la IA, necesitando el desarrollo de nuevas pruebas que destaquen las diferencias entre humanos y máquinas. Actualmente un modelo basado en GPT-4 ha logrado resolver el 84% de 12.500 operaciones matemáticas desafiantes.
En lo que respecta al razonamiento visual de sentido común la IA ha registrado un progreso significativo, marcando un aumento del 8% hasta alcanzar un 81,6%, acercándose a la línea base humana de 85.
Por su parte, el dueño de META y gran referente a nivel mundial Mark Zuckerberg cree que ninguna IA va a causar un problema existencial, al menos en este año. Aunque la IA se haya convertido en una herramienta casi que indispensable para el ser humano, este tipo de tecnologías no parecen tener un verdadero calado a la hora de decidir el futuro del ser humano.