El Dr. Carlos Morínigo, gerente de Salud del IPS, aportó más detalles sobre el inusual ritual religioso acometido por cuatro personas ayer en la UTI del IPS, que incluyó quema de ropas y extubar a su padre.
El paciente, que ingresó hace 10 a 12 días por un accidente de tránsito, tiene traumatismo cráneoencefálico y traumatismo de tórax. Se encuentra intubado y ventilado en terapia intensiva, según el diagnóstico del doctor.
Actitudes extrañas
De acuerdo con el relato de los familiares de otros pacientes, quienes se encontraban también en el albergue, desde el ingreso del accidentado al hospital, fue acompañado por un grupo de aproximadamente 10 personas.
Según los testigos, estas personas ya registraban «comportamientos extraños, de una forma religiosa rara, poco convencional».
En el transcurso de los días de internación, los testigos identificaron un cambio de conducta por parte de estos acompañantes, incluso, actitudes agresivas con familiares de otros pacientes.
Ritual previo
«Ayer, en horas de la madrugada, de este grupo de familiares denunciados, cuatro de ellos, se ubicaron detrás del albergue, literalmente, para rasgarse sus vestiduras y hacer una fogata con sus ropas, rezando, aparentemente», reveló el médico.
Contó que, para el rito, estaban con el torso superior desnudo y otras vestimentas que tenían encima. Los otros familiares lo denunciaron, y el personal de control se fue para ver qué pasaba, pero ya no le encontraron.
Atropello a la Unidad de Terapia
En ese momento, tomaron el acceso por la rampa que conecta el albergue con la sala terapia, que es prácticamente de uso exclusivo para visitas de pacientes, contó Morínigo.
Para ingresar a la sala, forzaron la puerta de blindex, rompiendo la cerradura. Primeramente, fueron junto a un paciente que le parecía que era su familiar, lo tocaron y al percatarse que no era, buscaron en la sala a su padre y lo encontraron, según el personal de blanco que iba tras ellos.
“Al verle, se abalanzaron. Ahí estaba el personal de blanco diciéndoles ´no se acerquen´, ´guarden la distancia´, ´él está grave´. Hecho que fue ignorado”, siguió relatando.
Misteriosas palabras
«Uno de los familiares, el más grande, de sexo masculino, le quitó el tuvo endotraqueal, por donde respira y le dice ‘levántate, camina, Dios ha dicho y una serie de cosas raras'», señaló el doctor sobre el paciente que estuvo entre 8 a 10 minutos sin el respirador.
Consecuencias
De acuerdo al doctor, las lesiones y secuelas de este ritual, que pone en riesgo la vida del paciente, aún están bajo evaluación.
