El sábado pasado se realizó una nueva edición de la ceremonia de entrega de los Premios Paraná, el único galardón vigente en la industria del entretenimiento en nuestro país.
Siempre discutidos y discutibles los Paraná, sin embargo tienen el mérito de haber sobrevivido durante más de 25 años y se han convertido en un referente del audiovisual en nuestro país.
Gracias a su implementación, figuras que podrían haber sido ignoradas por su importante trayectoria llegaron a ser reconocidas, mientras que muchos valores emergentes encontraron en estas premiaciones el primer estímulo para encarar con éxito el siempre difícil camino en esta actividad.
No olvidemos que en todo este tiempo otros medios e instituciones de gran prestigio también han organizado actividades similares. Desde los recordados Premios Cartelera, hasta los efímeros premios TVO también transitaron por esta noble intención de reconocernos como industria en constante crecimiento. Últimamente en el ámbito de las redes sociales e influencers también han surgido iniciativas parecidas, mientras que el teatro ofrece anualmente sus galas de premios “Edda”, así bautizados en homenaje a la inolvidable actriz Edda de los Ríos.
Nosotros mismos hemos propiciado durante muchos años el recordado premio a Los Doce del Año, con una mirada más social y científica, mientras que en el mundo de la publicidad se realiza hasta ahora el codiciado Gallo de Oro instituido por el diario Última Hora.
En materia de marcas últimamente ha ganado protagonismo la creación de los Top of Mind, con una mirada más comercial, mientras que instituciones bancarias y financieras se han preocupado por respaldar premiaciones al mundo del arte, especialmente de la literatura, la fotografía y las artes plásticas.
El Congreso de la Nación también tiene este tipo de premios, al igual que algunas municipalidades del país. En algunos casos incluyendo un pequeño respaldo económico que nunca está demás en el caso de nuestros creadores.
Por todo lo dicho, más allá de las críticas que con toda libertad y justicia se le pueden hacer a los Paraná, lo interesante es que sería que estos premios se repliquen en todo el país. Que las distintas organizaciones de la radio, la televisión, los diarios y demás medios puedan crear las condiciones para seguir estimulando un quehacer que al fin y al cabo nos representa también como sociedad. Con sus virtudes y defectos.
Mientras disfrutamos sinceramente de las nominaciones y los premios recibidos por la Megacadena de Comunicación, no podemos dejar de reconocer que, gracias a los Paraná, en años anteriores, nuestra comunidad ha reconocido a figuras como Charles González Palissa, Carlitos Vera, Aníbal Romero, los Compadres, Antolín Leguizamón y el propio Gustavo Khon, quien fue Paraná de Oro, con total justicia.
Ojalá tengamos alguna vez la humildad de reconocer el esfuerzo de la familia Amoroso y de la Fundación Paraná, y al mismo tiempo de tomar su posta para crear algo todavía más trascendente y sostenible en el tiempo. Claro que eso ya dependerá de un cambio de esa actitud tan recelosa que históricamente se han tenido los medios de comunicación desde sus orígenes en nuestro país.
Si así no lo hiciéramos no haríamos otra cosa más que reconocer en el tiempo que, -había sido que-, los Paraná no eran tan malos como muchos pensaban.
MF
"Premios al esfuerzo diario"
— MEGA TV (@Megatv_py) May 28, 2024
✍️ Comentario del día, por @Ferreiromario1 para #Info18, sobre los Premios Paraná.#MegaTV 🔗 https://t.co/zh1G3kMpqC pic.twitter.com/KEMbG9kCQK