El viceministro del trabajo, César Segovia, fue consultado sobre el efecto dominó que se da cada vez que hay reajuste el salario mínimo, pues de inmediato se remarcan precios de productos en los comercios.
Indicó que en la próxima reunión del consejo de salarios mínimos, donde hay representantes del sector empresarial y FEPRINCO, le pedirán un compromiso que no se eleven los precios de productos de la canasta básica.
La intención es lograr esa promesa antes del 30 de junio.
El viceministro afirmó que se debe entender que la variación el salario mínimo, afecta a un porcentaje interesante, aunque no mayoritario del sector trabajador, serían unas 280 mil personas las que tendrán el reajuste.