El intendente municipal, Diego Riveros, calculó que por lo bajo desde el inicio de la octava hasta la festividad central del 8 de diciembre, el movimiento económico es de cerca de 10 millones de dólares.
Para los locales comerciales es algo demasiado importante, ya que se revitaliza la economía de la ciudad.
Además, indicó que los hoteles están llenos, los restaurantes y supermercados incrementan mucho su volumen de ventas con la llegada de los peregrinos.